Este proyecto integral se enfoca en la instalación de un ascensor y un elevador vertical en un bloque residencial, abordando obstáculos únicos y priorizando la accesibilidad. Ante la imposibilidad de descender el ascensor a cota 0, proponemos una solución innovadora con un ascensor de foso extra reducido y un elevador vertical, superando eficazmente los 2,35 metros de desnivel entre la calle y el ascensor actual.
La entrada se ha vuelto completamente accesible al eliminar el escalón existente y diseñar una estructura autoportante de perfilería metálica que minimiza la pérdida de espacio. El uso de cristal en el cerramiento del elevador crea una sensación de amplitud y luminosidad, combinando la funcionalidad con un toque estético moderno y elegante. Este proyecto refleja nuestro compromiso con soluciones innovadoras, mejorando la accesibilidad y la calidad de vida de los residentes en espacios más inclusivos y funcionales.
En IPEL, nos entusiasma contribuir a la creación de entornos más accesibles y acogedores.